IMM, Literatura

IMM (43)

Más incorporaciones a mi biblioteca. De momento sigo con la intención de adquirir lo menos posible, pero teniendo en cuenta que en abril fue mi cumpleaños, siempre anima ver como regalo algún sospechoso paquete de forma rectangular:

Imm-43

  • Festín de hielo y fuego, Chelsea Monroe-Cassel y Sariann Lehrer. Un libro de recetas basado, como os podéis imaginar por el título, en el universo de Canción de Hielo y Fuego. Recetas del Norte, del Sur, desayunos, platos principales y postres que disfrutan los protagonistas de la saga literaria más de de moda los podremos degustar en nuestro hogar. Tengo muchas ganas de ponerme manos a la obra.
  • Un mal nombre, Elena Ferrante. Continuación de la saga Dos amigas, tenía la necesidad de leer éste y finalmente apareció en mi botín cumpleañero. Me da que lo leeré dentro de poco. Y que acabaré comprando el tercero. La intuición, digo yo…
  • El ojo castaño de nuestro amor, Mircea Cărtărescu.  Uno de esos títulos que TENÍA que estar en mi estantería. Preciosa la portada, por lo que dicen, precioso el contenido, soy incondicional del autor así que era cuestión de tiempo.
  • El péndulo de Foucault, Umberto Eco. Cuando murió el autor italiano me dije que tenía que releer este libro. Después, leyendo la Jot Down Smart me topé con un artículo en el que hablan pormenorizadamente de él. Fue justo eso lo que me hizo decidirme, saltar la alarma: tenía que comprarlo. Es uno de esos títulos que me han configurado como lectora, y se lo debía a Eco y a mí misma.
  • La víspera de casi todo, Víctor del Árbol. Con éste me ha pasado algo curioso: lo tenía anotado desde que salió porque al autor hay que leerle. Pensé en comprarlo en la Feria del Libro de Madrid, pero un día MientrasLeo comentó que estaba con él en un encuentro literario, yo hice un comentario de ansia por el libro, y ella cogió un ejemplar, le pidió que me lo firmara y me lo envió a casa. Twitter es una herramienta increíble y en Invernalia hay gente maravillosa. ¡Muchísimas gracias!
  • El fin del mundo, Upton Sinclair. Primer tono de la saga de Lanny Budd de cuya segunda parte os hablé aquí. Ha sido un envío editorial de los amigos de Hoja de Lata que estoy encantada de tener en la estantería porque promete grandes ratos.
  • La puerta de los ángeles, Penelope Fitzgerald. El quinto libro de la autora que ha publicado Impedimenta y el que faltaba en mis estanterías. La tabla de salvación por si me fallan otros títulos. Me da seguridad ver su lomo negro en mi estante.

Esto es todo por el momento, ¡hasta el botín de la Feria del Libro!

Namaste.

Literatura, Sender

Viaje a la aldea del crimen, Ramón J. Sender

Cuando oímos de hablar de Casas Viejas pensamos en un suceso trágico en la época de la República. Alguna cuestión oscura con muertos de por medio, uno de esos eventos oscurors que se fijan en el calendario para la posteridad. Quizá no sepamos señalar el pueblo en el mapa, pero estamos seguros de que su efeméride no es positiva.

Viaje-a-la-aldea-del-crimenLa historia nos cuenta que Ramón J. Sender viajó al pueblo gaditano en calidad de periodista para escribir algo sobre lo que acababa de ocurrir. Trasmitir al resto de España los hechos, contar las muertes y el dolor.

Así, Sender llega y recoge los testimonios, los documentos y demás información para reconstruir la situación que se llevó a cabo en 1933, cuando un Sindicato Agrario declaró el comunismo libertario, enfrentándose a la República y tratando de distribuir los bienes y las tierras de los terratenientes para los campesinos. Lo que comenzó como una insurrección en varios puntos de España, en Casas Viejas por perder la comunicación del exterior, se llegó a mayores, produciéndose disparos y muertos en uno y otro bando.

Pero lo peor vino después, cuando la Guardia Civil y la Guardia de Asalto asaltaron la choza en la que vivía Seisdedos, líder de la revuelta, que se encontraba con su familia. El asalto fue tan brutal que llegaron, primero, a ordenar que se ametrallara, y segundo, al ver que desde dentro se resistían, a incendiarla, llegando a disparar a los pocos que pudieron salir de él.

Para acabar de convertir el suceso en algo trágico, se dio la orden de cometer una razzia en el pueblo, esto es, matar a todo aquel que allí se encontrara. De esta forma, la autoridad se dedicó a sacar a cada uno de los campesinos que quedan de sus casas y los mató, alegando después que era una orden que había venido de arriba.

Las consecuencias del suceso fueron graves para la estabilidad de la República, dañando su imagen por la brutalidad del suceso y por la escasa información que proporcionaron. En este sentido, Sender fue uno de los primeros en publicar una crónica que difería de la versión de oficial (donde todos los muertos se encontraban en la casa de Seisdedos), publicándose con posterioridad esta versión más larga en la que incluía testimonios y fragmentos de la documentación de la investigación del suceso.

Sin duda no se trata de ninguna lectura liviana ni de buen gusto, pero sí necesaria para conocer un poco más uno de los episodios negros de la Historia de España. Ayuda el hecho de que los capítulos sean cortos, nos da margen para respirar y tomar distancia con una historia tan brutal como cierta. De vez en cuando hay que salir de la zona de confort y enfrentarse a otro tipo de lecturas.

Muchas gracias a Libros del Asteroide por el envío.

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  • Dura, violenta y poderosamente cruel.
  • Cómo nos acerca Sender a las condiciones de vida de los vecinos.

Contras

  • Saber que es una historia tan trágica es real.

Namaste.

Bazar, Literatura

Séptimo aniversario

Parece mentira pero el tiempo pasa volando, y hoy 23 de mayo, celebro mi séptimo aniversario del blog.

Sucede en muchas ocasiones, que miras cuánto hace que no has leído un determinado autor y te sorprendes al saber que ha pasado bastante más tiempo del que pensabas. Igual ocurre en nuestro día a día cuando pensamos en viajes o en cuánto hace que no vemos a un amigo. Los días pasan y pasan y sólo cuando echamos la vista atrás nos cercioramos del inexorable paso del tiempo.

Con esto de tener un espacio en Internet nunca se sabe. Hubo momentos en los que pensé que no llegaría al siguiente cumpleblog y otros en los que si me lo hubieran dicho que llegaría a este punto no lo habría creído.

Sin embargo, como no quiere la cosa, pasito a pasito, nos hemos plantado en el séptimo aniversario.

Qué bonito es el número 7. Los siete días de la semana, los siete enanitos, los siete reinos de Poniente, los siete pecados capitales, los siete colores del arcoíris, las siete colinas de Roma, las siete vidas de los gatos, las siete notas musicales, las siete maravillas del mundo, los siete Horrocruxes de Voldemort, los siete libros que me voy a comprar para celebrarlo…

Porque esto iba de libros, ¿no?

Gracias a todos por estar ahí.

Namaste.

Autor, Borges, Literatura

Ficciones, Jorge Luis Borges

Hablar de determinados libros resulta un asunto complicado. Éste es uno de esos.

Tenía pendiente volver a leer a Borges desde hace mucho tiempo, cuando leí un libro suyo que en su momento no supe apreciar. Tras esta experiencia me atenazaba una doble sensación: quería leerle pero tenía miedo por si no me gustaba. No en vano Borges es uno de los más aclamados autores en lengua castellana.

FiccionesAsí las cosas, Bartleby me regaló este ejemplar y decidí que ahora era el momento.

A partir de aquí comienza lo difícil.

El libro de cuentos se divide en dos partes: El jardín de senderos que se bifurcan y Artificios. La primera fue publicada primero como libro individual, y posteriormente se añadió la segunda parte para configurar un libro único.

Los cuentos que se incluyen en Ficciones difieren de longitud y temática, pero si algo tienen en común es su carga estilística, que nos mete en laberintos y misterios, donde cada frase y cada palabra pesa como una mole, donde hay que coger aire de vez en cuando.

Leyendo este libro me he sentido zarandeada, sin saber qué esperar, incómoda, cansada. Exhausta tras leer dos páginas, dos párrafos, dos frases.

Leyendo este libro he mirado al infinito tratando de procesar toda la información, he boqueado, he mirado a los lados quizá esperando una palmadita en la espalda de algún lector que supiera reconocer por lo que estaba pasando.

Leyendo este libro me he sentido apabullada, presionada. Al saber que estaba en mi mesilla esperando su turno, con atracción y miedo a la vez.

Ficciones es uno de esos libros que hay que releer. Que atrapan en un mundo que a día de hoy no soy capaz de comprender, pero que reconozco por su calidad, por su visión, por lo absolutamente fuera de serie del uso del lenguaje.

Con Ficciones me he sentido muy pequeña. Como aquélla lectora que no sabía interpretar las letras y aprovechaba para jugar con los libros troquelados en forma de coche desplazándolos por las mesas. Como la lectora que comprende cada palabra pero que no consigue alcanzar la magnitud de cada significado, sobrepasada por el estilo de Borges.

Eso es lo que he sentido leyendo a Borges. Para saber qué sentiríais vosotros tendréis que leerlo.

 

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  • El estilo de Borges y cómo va planteando las tramas.
  • Me encanta esta edición de DeBolsillo.

Contras

  • Apabulla, hay que leerlo con paciencia y despacio.

Namaste.

 

 

¿Y ellos qué opinan?, Literatura

Y ellos, ¿qué opinan? (XXV): Miguel Ángel Hernández

hernandez-3Miguel Ángel Hernández (Murcia, 1977): escritor y profesor de Historia del Arte en la Universidad de Murcia. Es investigador y autor de artículos y ensayos, además de haber colaborado en revistas culturales. En el ámbito de la producción literaria, ha publicado diversas obras de ficción y dos novelas, siendo la última El instante de peligro (Anagrama), resultando finalista del Premio Herralde.

1.- ¿Qué libro estás leyendo actualmente?

Cero K, de Don DeLillo. Me está fascinando, como todo DeLillo. Pura magia literaria.
El último libro  del autor estadounidense. Mi experiencia con él es muy limitada y no del todo concluyente, tal y como comenté en la reseña de Punto Omega. Es uno de esos autores a los que quiero regresar… ¡pero siempre se cruza otro libro antes!

2.- Un libro que nos recomendarías.

El malogrado, de Thomas Bernhard. Un libro de esos que te marcan para siempre.
Una de mis particulares bestias negras literarias: todo el mundo lo recomienda pero nunca me he acercado a su obra he leído. Os dejo una reseña del  libro en cuestión.

3.- Un autor por el que sientas fijación.

Diría que Bernhard. Pero ahora estoy en ese cruce de caminos entre Paul Auster y Enrique Vila-Matas. Leería hasta su whatsapps.
Parece que Hernández quiere recordarme en cada respuesta que me tengo que poner las pilas. Porque si a Auster le he leído bastante (Leviatán, El país de las últimas cosas, La trilogía de Nueva York, El palacio de la Luna) a Vila-Matas nada de nada. ¡Y eso que tengo El viaje vertical en casa!
Y vosotros, ¿habéis leído algo de DeLillo? ¿Y El malogrado, de Bernhard? ¿También tenéis autores eternamente pendientes? ¿Por dónde me recomendáis que empiece con Vila-Matas?
Namaste.
Autor, Literatura, Sinclair

Entre dos mundos, Upton Sinclair

Si Benito Pérez Galdós hubiera vivido los Estados Unidos del Siglo XX, se habría llamado Upton Sinclair.

Desconocía por completo este autor. No sabía que había sido ganador del Premio Pulitzer, desconocía su saga que empezó en 1940 con El fin del mundo. No tenía ni idea de nada. Fue gracias a los amigos de Hoja de Lata, que me ofrecieron este ejemplar, cuando conocí al autor. Y menos mal, chicos, menos mal.

Entre-dos-mundosEntre dos mundos relata la vida de la juventud de Lanny Budd, hijo de un magnate armamentístico estadounidense, vividor y playboy que vive en Francia en una época convulsa.

Eso sería Entre dos mundos en dos líneas, explicando tan sólo la idea principal que vertebra la historia. Pero hay mucho más, tanto, que con esta reseña no me podré acercar jamás la magnitud del texto.

Sinclair nos mete de lleno en la época de los años 20, donde tienen cabida reflexiones gigantes del mundo de la época: sabemos de política, en el término amplio de la palabra y también en el estricto: cambios de presidentes, complicaciones en los países, (centrándose en Inglaterra, Alemania y Francia), las evoluciones de las negociaciones entre Alemania y Francia sobre el pago de las indemnizaciones pendientes de la Gran Guerra; cuestiones de índole social: miseria, sindicatos, tensiones, luchas de poder; y también los nuevos cambios que se avecinan: un tal Hitler, el nuevo presidente de Italia, la violencia de las camisas negras y el antisemitismo en incremento de la época.

Habían ganado la guerra pero habían perdido la paz.

Página 200

Todo eso nos dice mucho del ambiente, pero hay también reflexiones culturales, de evolución de las tradiciones, de los modos de vida: la moda, el mobiliario, las tendencias… todo está presente en esta magnífica novela que supone una el método más sencillo de teletransporte, por medio de encuentros casuales con escritores y pintores, descripciones de muebles y ropas, personajes secundarios que completan la enorme descripción ambiental de la historia.

Divide tu mente en dos mitades y construye un muro de contención que aísle por completo la una de la otra. Sé sensible ante el arte e insensible ante la vida. Aprende a seguir el ejemplo de la condesa rusa que lloraba al contemplar las cuitas de un tenor de ópera mientras su cochero se congelaba hasta morir en su carruaje a las puertas del teatro.

Página 400

Entre dos mundos no es una novela de este mundo, es LA novela de la época. Sinclair no es un escritor parcial, sino uno global: para él no cabe la supresión de un tema o la captura en diagonal de un momento. Todo ha de ser concienzudo y bien documentado. Entre dos mundos es una novela del todo.

Lógicamente los temas a tratar son variados, y para ello cuenta con un gran listado de personajes secundarios que pueden narrar de primera mano su visión de la situación: patrióticos franceses, decaídos alemanes o escépticos ingleses son sólo algunos de las decenas de secundarios con información privilegiada: diplomáticos, magnates, políticos y periodistas nos narran la cara B de las negociaciones, de los acuerdos que todos hemos estudiado en Historia.

Éste es uno de sus aspectos grandes de esta novela: que más allá de las grandes fechas, de los acuerdos y convenios, hay personas presionadas, miedosas, que temen perder el poder o a su electorado, y más allá de eso ciudadanos de a pie que desconfían de los de arriba, con sus propias cuestiones domésticas.

Por supuesto, Sinclair también se detiene en lo habitual en la vida de un joven: las amistades y los amores, las dudas por el futuro y la búsqueda de un lugar en la vida, la preocupación por la situación actual y la frivolidad de las fiestas.

Así, Entre dos mundos es una novela tan basta, tan gigante, que ha de ser disfrutada por sus cuatro costados, leyéndola progresivamente sin perder un detalle de todo lo que nos cuenta.

Mención aparte merece la edición de Hoja de Lata: cuidada, traducción impecable y unas páginas firmes y a la vez suaves que aportan una experiencia inolvidable a la lectura.

Hoy sé que Entre dos mundos es una de las mejores novelas que he leído en este 2016. También que no le pienso perder la pista a Lanny Budd, y que marcaré en el calendario noviembre de 2016 que es cuando se publica Los dientes de dragón, la tercera parte de la saga. Vosotros deberíais hacer lo mismo.

Sin duda continuaré leyendo a Sinclair. Menudo descubrimiento.

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  • Cómo articula lo grande (la Historia) con el día a día de los ciudadanos.
  • El final, que te mantiene pegado a las páginas aunque ya sepamos lo que va a ocurrir.

Contras

  • El libro es largo, hay que leerlo poco a poco y a su tiempo.

  • De tanto cargarlo conmigo mi ejemplar ha sufrido daños. 😦

Namaste.

 

 

Literatura, Offill

Departamento de especulaciones, Jenny Offill

Comenta Rusta en su reseña que esta historia se asemeja a los estados de Facebook de una persona, dado que incluye detalles del día a día, sentimientos, experiencias y temas variopintos que se le pasan por la cabeza a una persona cualquiera.

Os voy a ser sincera: cuando leí esto me asusté y pensé que si era así no era para mí, que no me iba a gustar, que seguramente era demasiado superficial.

Departamento de especulacionesEs cierto que Departamento de especulaciones resulta una historia atípica si nos atenemos al modo en que está narrada, donde no hay diálogos ni descripciones, donde sólo se incluyen píldoras o pequeños pensamientos de las reflexiones. Viene a ser como un diario: sin antecedentes ni explicaciones de más, dado que el destinatario del mensaje ha de ser uno mismo. Donde se pueden incluir detalles íntimos o livianos, absurdos para cualquiera que no sea el escribiente.

En este sentido, tiene la ventaja de que no se detiene en descripciones pero el inconveniente de que en ocasiones carecemos de información adicional. Pero tampoco lo necesitamos, porque la explicación puede venir un par de páginas más tarde, a modo de anécdota.

Así, conocemos un matrimonio en el que las cosas van variando: desde el inicio de la relación hasta cada una de las nuevas variables que se añaden a la ecuación original, un hijo, nuevas responsabilidades, y por supuesto, los problemas conyugales: cómo se afronta la falta de confianza, las dudas y la incertidumbre, los cambios que hacen peligrar la relación, el paso del tiempo… etc.

Sin mantener un orden cronológico, la protagonista rememora momentos de su relación mientras paralelamente nos cuenta el devenir de su historia, de esta forma, sabemos cómo se conocen y cómo afrontan la crisis, qué dice su hija y qué pensó ella la primera vez que le vio.

El resultado es sorprendente, dado que capta de forma perfecta toda la complejidad de una relación sentimental sin caer en la lágrima fácil ni en el chiste manido. Sin demasiadas palabras, esboza una historia de amor real sin idealizar nada, el antítesis de una historia Disney.

Departamento de especulaciones es una de esas historias que te apetece releer, una de esas novelas que sabes que gustan a todos.

Gracias a Libros del Asteroide por el envío.

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  • La forma de contar la historia. Esquemática pero suficiente.
  • Cómo engarza los temas.

Contras

  • Tema agridulce en muchas ocasiones.

Namaste.