Literatura

Septiembre y el regreso.

Una vez acabado el calor, los excesos veraniegos y todo lo que acompaña a la estación (las quedadas con amigos, las visitas a la playa, las fiestas patronales, los viajes…), llega septiembre con ganas de conseguir nuestra vuelta a la rutina.

Para muchos acabar agosto es un problema. Lejos quedan los días sin horarios, las tardes interminables y el calor.

Para otros, entre los que me incluyo, volver es siempre una buena noticia. Regresamos a nuestra rutina, sí, pero también a muchas aficiones y cosas por hacer que han quedado relegadas en un segundo plano en verano: aficiones, nuevos hobbys o costumbres que somos capaces de seguir el resto del año menos en verano.

Septiembre y su rutina nos ordena y nos ayuda a regresar a hacer cosas que antes pensábamos que no podríamos hacer, que tenemos pendiente desde siempre, que queremos probar por primera vez.

Para mí, el otoño significa lecturas de autores rusos y por eso en mis lista de próximos libros están las novelas La muerte de Iván Ilich, de Tolstoi y Oblómov, Iván A. Goncharov.
También ponerme al día en mis podcast favoritos, como Hora de la muerte y El café de Mendel, que hacen mucho más ameno mis desplazamientos en coche.

Pero si lo que quiero es continuar con mis lecturas la mejor opción es Audible: una plataforma de audiolibros perfecta para aprovechar para regresar a la lectura, con la que podemos exprimir el tiempo al máximo mientras realizamos otras tareas.

Y vosotros, contadme: ¿os gustan los audiolibros? ¿Escucháis podcast de literatura? ¿Estáis contentos con la vuelta a la rutina?

Namaste.



Aguirre, Autor, Literatura

Un tal Cangrejo, Guillermo Aguirre

Un tal Cangrejo (Sexto Piso, 2022) es la historia de Cangrejo, el animal de pinzas mortales.

Cangrejo es el apodo de un chaval uno más de un barrio humilde del Bilbao de los años 90, al que su perro Pintxo le juega una mala pasada. Porque para él está claro: la culpa de todo la tiene el perro.

Si las notas se podían falsificar, quizá significara que todo era falsificable. Así, quizá Cangrejo pudiera falsificar sus emociones, hacer pasar por principios lo que en realidad era miedo, por valentía lo que era horror, por fuerza lo que sabía era solo agresividad.

Página 81

La estructura de la novela se apoya en tres patas: un narrador omnisciente que nos cuenta la historia en tercera persona; las respuestas en modo entrevista a algunos de los personajes principales de la historia, y las valoraciones personalísimas de Aguirre, que aparecen para ponernos en contexto de la situación política y social del momento, como por ejemplo la siguiente:

El euro nos pilló con retraso, resaca de un efecto 2000 que no derribó ningún avión en vuelo, que no regresó los relojes clónicos a cero, que no produjo el colapso de los microondas, las neveras, ese apocalipsis hogareño y anunciado que tanto deseábamos.

Página 379

El resultado es una novela que va saltando de trama: los capítulos en forma de entrevistas adelantan lo que va a suceder, y posteriormente los del narrador omnisciente detallan cada situación. Así, con el juego a tres bandas, el autor puede organizar la acción y aportar los datos que quiere en cada momento, guardándose detalles que desarrollará más adelante, articulando información y los silencios para rellenar la cronología pasada.

Los personajes mezclan lo más canallita y popular de la literatura patria con un elenco de personajes muy propios de los 90 y que hoy en día no vemos tan marcados: alcohólicos, drogadictos o camellos que se relacionan de tú a tú con los adolescentes más hormonados y pasotas del barrio.

El compendio es la radiografía de un momento temporal muy concreto, de una ciudad en expansión que comienza a ver las mieles de una expansión económica que aún tardaría un poco en explotar en nuestra en su cara.

La violencia, la inseguridad y las ansias por ser aceptado en el grupo son algunos de los aspectos clave para entender a Cangrejo.

Pero que os quede claro: la culpa de todo la tuvo el perro.

Gracias a los amigos de Sexto Piso por el envío.

FICHA:

Te gustará si te gustó El día del Watusi, Fernando Casavella.
Pros – El análisis y descripción de la época.
– La reflexión de aspectos psicológicos con la trama de acción.
Contras – En el algunos capítulo, reiterativo, en otros, la acción se hace algo lenta.

Namaste.

Autor, Literatura, Roth

La leyenda del Santo Bebedor, Joseph Roth

A veces me ocurre que determinados libros cortos, con la excusa de que los cuelo en cualquier momento entre otros títulos más largos, no los acabo de leer.

La leyenda del Santo Bebedor es una excepción, ya que con sus menos de cien páginas, he logrado intercalarlo al poco de comprarlo. Tenía pendiente leer al autor y este título me pareció una manera perfecta de hacerlo.

La leyenda del Santo Bebedor es una novela cortísima que narra la historia de Andreas, un bebedor que deambula por las calles de París, que contrae una deuda que quiere devolver: un desconocido le da dinero con el compromiso de que Andreas deposite dicha cantidad en la iglesia como ofrenda.

Aunque el propósito del protagonista es ferviente y claro: devolver esos 200 francos, en su camino el destino le lleva por otros derroteros. Así, incluso consigue hacerse con una cifra aún mayor, pero el alcohol y ciertos encontronazos con personajes del pasado le hacen primero, frecuentar elegantes hoteles para después, de nuevo, perder el camino y fracasar cada vez que trata de poner camino hacia la iglesia.

Porque no hay nada a lo que más fácilmente se acostumbre una persona que a los milagros, cuando los ha conocido una, dos o tres veces. Sí, la naturaleza del hombre le lleva a enfadarse cuando no obtiene de forma continuada lo que parece haberle prometido un azar casual o pasajero. Así son las personas.

Es apabullante cómo Roth despliega tantos temas en un texto tan corto, y como la historia, que no deja de ser una parábola más desarrollada, llega a temas más intricados, como la fuerza de voluntad, la culpa o el destino, la importancia de la relación entre las personas y la desesperación.

No os voy a contar más porque tardáis menos en leer el título que en seguir leyendo esta reseña, simplemente os lo recomiendo, se lee en dos ratos y si no tenéis demasiado tiempo o lleváis lecturas poco satisfactorias, esta os reconciliará con la literatura.

Me recuerda a La vida es sueño de Calderón. Todo es cruel pero todo es real.

FICHA:

Te gustará si te gustó La vida es sueño, Calderón.
Pros – Inteligente, directo y claro.
– Pura literatura. Todo es destacable.
Contras – La frustración que nos hace sentir.

Namaste.

Autor, Dick, Literatura

¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, Philip K. Dick

De entre las muchas carencias lectoras que tengo, trato anotar alguno de los títulos pendientes entre las lecturas mensuales, con objeto de ir subsanando faltas.

Este es uno de los títulos, y en el mes de agosto lo colé entre lecturas mientras trataba de pasar unos días un poco más frescos. Reconozco que ha sido lectura de piscina, y la verdad que le pega mucho a esta historia de ciencia-ficción.

Vaya por delante mi desconocimiento sobre que esta historia, que en la literatura conocemos por ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? pero que en el cine tiene un título mucho más reconocible: Blade Runner. Desconocía que la famosísima película de Ridley Scott se basara en esta historia.

La novela de Philip K. Dick está protagonizada por un cazarrecompensas. Uno que busca un desarrollado tipo de androides en medio de una Tierra semi abandonada donde solo han quedado los que no se pudieron marchar. Él sí está preocupado por su oveja eléctrica, no sólo porque no es una oveja de verdad, como él se merecería, sino, porque además, decide dejar de funcionar de un día para otro.

¿Sueñan los androides?, se preguntó Rick. Evidentemente. Ésa es la razón de que a veces asesinen a sus empleadores y huyan aquí.

Página 208

La complicación de saber quién es humano y quién no se añade a la tarea del protagonista: acabar con unos androides que se han infiltrado en el planeta. Su cometido conlleva plantearse qué nos hace humanos y qué nos distingue de las máquinas. Desde ahí, como imaginaréis, las preguntas que se dejan en el aire son unas cuentas.

Aunque el trasfondo metafísico acompaña cada paso del camino de Rick, lo cierto es que ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? es una historia divertida, sardónica, que incluye situaciones absurdas para ejemplificar los verdaderos temas que traslucen: el uso de la tecnología, la soledad de los humanos… todo tan actual que da miedo.

No es redonda, hay algo en la trama que falla, que no acaba de cuadrar bien en el ritmo del resto de la novela. Pero me encanta seguir comprobando que, simplemente con un puñado de personajes y una buena idea se puede dar forma a una novela corta tan interesante como ésta.

Y vosotros, ¿la habéis leído?

FICHA:

Te gustará si te gustó Sinsonte, Walter Tevis.
Pros – Entretenido, divertido y metafísico a la vez.
– Los diálogos y el trasfondo de la historia.
Contras – Hacia la mitad hay algo que rompe el ritmo que no acaba de encajar.

Namaste.