Autor, Literatura, Mankell

Asesinos sin rostro, Henning Mankell

De vez en cuando me da por saltarme mi lista de pendientes o de libros que voy a leer a continuación, los cuales están situados en una estantería en concreto, y decido comenzar a leer un libro que no tenía en mente. Esta situación suele estar motivada por alguna conversación, el otorgamiento de un premio o la noticia de un autor en concreto.

Hacia-rutas-salvajesJusto eso me ocurrió con esta novela. Desde El chino no había vuelto a leer a Mankell, pero de repente la necesidad de comenzar con la saga de Wallander me hizo seleccionarlo en mi Kindle para acometer su lectura. Mi idea era comenzar la saga auspiciada por muchos buenos comentarios, como los de Atram y Molinos.

Asesinos sin rostro es, por tanto, el primer libro de la saga del famoso inspector, donde se nos presenta a Wallander, que trata de resolver el asesinato de una pareja de ancianos con una única pista, la palabra que pronuncia la esposa antes de fallecer: extranjero.

Publicada en 1991, muchas de las cosas que nos presenta nos parecen a día de hoy obsoletas (el uso de la tecnología, que explique demasiado un sistema informática), mientras que otros son poderosamente actuales, como la crisis de refugiados de la Suecia de época. La mezcla es extraña y chocante.

Desde el punto de partida del asesinato, Wallander, el irredento inspector errático y maltratado por la vida, trata de unir las piezas para seguir la pista de un asesinato aparentemente irresoluble.

Como suele ocurrir en este tipo de novelas, las cosas se lían hasta límites insospechados a través de los bajos fondos de Suecia, con un inspector que a duras penas sigue los pasos de los criminales.

A pesar de que está bien escrita, ha sido una de esas lecturas que me han dejado fría, en el sentido de que no me transmitía ninguna sensación lo suficientemente fuerte como para odiarlo o amarlo, como para querer conocer el final o como para querer tirarlo por la ventana. Ya lo he dicho en varias ocasiones: mejor odiarlo que resultar indiferente, porque se convertirá en uno de esos libros que no recordaré en un par de años. He llegado a dudar si ya no estoy en sintonía con la novela negra, pero claro, luego pienso en Jim Thompson y se me pasa.

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  •  La creación de los personajes y los diálogos que tienen entre ellos.

Contras

  • Su lectura me ha resultado indiferente.

  • Me he dado cuenta de que asumo perfectamente las limitaciones de los siglos pasados, pero cuando en una novela ambientada en los 90 comentan demasiado los temas tecnológicos me aburro soberanamente. No puedo evitarlo. Quizá sea porque ya lo he vivido y sigo teniendo pesadillas con el sonido del router.

Namaste.

Autor, Chang, Literatura

Un amor que destruye ciudades, Eileen Chang

Desconocía el nombre de Chang hasta que Libros del Asteroide trajo este ejemplar a su catálogo y después, a mi buzón. En esta edición se incluye una novela corta, la que da título al libro, más un relato llamado Bloqueados.

978841621370Un amor que destruye ciudades se centra en la familia Bai, que trata de buscar pretendientes para una de las solteras de la familia. Se articula a partir de este motivo una novela que recuerda a Jane Austen, donde de un lado se encuentra la voluntad de la familia de conseguir un buen pretendiente y de otro, la personalidad de la protagonista, enfrentada a los intereses de su familia pero con ganas de tomar las riendas de su propia vida.

Como suele ocurrir con las novelas asiáticas, el tono de la autora tiene un punto de melancolía y nostalgia y la acción ocurre más lentamente que en las novelas occidentales. La sutileza de los sentimientos y de las conversaciones son las que dan empaque a la historia y nos trasladan a un mundo de silencios y medias palabras donde el qué dirán forma parte del día a día.

El resultado es una novela de sentimientos donde abunda lo que no se dice, como si cada uno de los personajes fuera un misterio que tenemos que ser capaces de resolver. Una forma muy distinta de afrontar las relaciones amorosas a la que personalmente, no estoy acostumbrada, pero que resulta cuidadosa y alejada de los clichés.

En el relato Bloqueados se incluyen los aspectos que he comentado antes pero limitado a un número de páginas más reducido, consiguiendo que la acción avance más rápidamente que en la novela.

En definitiva, una historia perfecta si os gustan las historias románticas o para los que tengáis poco tiempo pero ganas de leer.

Gracias a la editorial por hacérmelo llegar.

FICHA:

Te gustará si te gustó

Pros

  •  Cómo enfoca la relación amorosa.
  • El uso de los silencios y las medias frases.

Contras

  • Al principio me he liado con los personajes (Cuarta Cuñada, Tercera Cuñada, Sexta Tía…)

Namaste.

IMM, Literatura

IMM (44)

El mes de junio los lectores estamos de fiesta, una fiesta caracterizada por el calor, el Retiro lleno de gente y los libros por doquier. Armada de mi sempiterna lista (en este caso, con los libros que quería adquirir ya decididos), me acerqué a la Feria del Libro de Madrid. Seguramente muchos de vosotros ya lo habréis visto por las redes sociales. Aquí tengo el botín que me hice en la Feria más una nueva incorporación:

IMM-44

  • La tierra que pisamos, Jesús Carrasco. Desde la publicación de Intemperie quería leer al autor pero nunca sacaba hueco para hacerlo. Ésta es su segunda novela y también la ponen por las nubes. Aproveché que el autor se encontraba firmando para hacerme con su firma y conversar un poco con él. Siempre me da rabia ver autores destacados sin fila y otros personajillos con filas de cien personas, pero fin, la feria es así.
  • El guitarrista, Luis Landero. Tengo apuntado en mi libreta Juegos de la edad tardía desde hace muchos años. Sin embargo, por recomendación e insistencia de Bartleby acabamos acercándonos a la caseta donde se encontraba el autor y fue éste el título escogido. Si no me gusta le echaré la culpa a él, huelga decir.
  • Cartas a Milena, Kafka. He sido muy cansina con este libro (quizá hasta demasiado, ¿no Atram? :S), hasta llegar el punto de la NECESIDAD de hacerme con él. Di vueltas y vueltas hasta que encontré la caseta de Alianza. Fui tan convencida a la caseta diciendo el nombre que una pareja de ancianos se dieron codazos entre sí mientras ojeaba el título. Nunca sabré si también lo compraron.
  • Estrómboli, Jon Bilbao. Uno de esos libros que enamoran por la portada y después atraen por todos y cada uno de los comentarios positivos que hay por Internet. Dudaba si hacerme con él o no, pero casualmente el día que me acerqué se encontraba firmando el autor. Llegué por los pelos pero pude hacerme con él. Tengo muchas ganas de empezarlo. Edita Impedimenta.
  • Crimen y castigo, Fiódor Dostoievski. Cuando en el verano de 2001 leí esta novela era mi primera incursión con el genial autor ruso. Para más inri lo hice con una de esas ediciones sacadas de la biblioteca que se van desmontando en cada página, con traducciones dudosas y que por la fecha de edición podría haber sido mi padre. Llevo enamorada de las ediciones de Austral mucho tiempo, peeero, unas porque las prefiero en inglés, otras porque ya las he leído, no me he hecho con ningún ejemplar. Cuando vi que publicaban este título, decidí que tenía que hacerme con él. En Internet me fijé que la fecha de publicación era posterior, así que me llevé una grata sorpresa al ver que ya lo tenían disponible para su compra en su caseta.
  • Cosecha, Jim Crace. La caseta de Hoja de Lata es una de esas que quisieras llevarte a casa. Tuve en la mano Tea Rooms, de Luisa Carnés a consecuencia de la reseña de Atram pero el que venía en mi lista es éste. Como fue la última caseta en la que compré y mi tarjeta ya echaba humo decidí contenerme y no llevarme los dos. Sobre Cosecha, sólo diré que he leído la reseña de Babelia en diagonal, pero con la mención de Faulkner me basta y me sobra.
  • Manual de mujeres de la limpieza, Lucia Berlin. Cuando ves un título en todos los sitios, en todas las redes sociales, en todas las reseñas y aún así no te convence, lo acabas ignorando. Ahora bien, si de repente distintas personas te dicen la misma frase “El título es malo, la portada feísima, pero aún así tienes que leerlo”, me sale un movimiento de cuello por la coincidencia y el convencimiento de que algo ha de haber en un libro que causa tantas pasiones. No tenía pensado comprarlo, la verdad.
  • Un amor que destruye ciudades, Eileen Chang. Envío de los amigos de Libros del Asteroide. Me lo encontré en el buzón el lunes siguiente a la Feria, cuando aún no había tenido tiempo de colocar los libros que acababa de comprar. Ya lo he leído así que pronto tendréis la reseña por aquí.

Y vosotros, ¿habéis comprado algo en la Feria del Libro de Madrid? ¿También cotilleáis qué compran los demás? ¿Vuestro entorno cercano os llama locos cuando llegáis con las bolsas? ¿No os ponéis un poco enfermos al ver las colas inmensas de cualquier personajillo de medio pelo? ¡El año que viene más!

Mientras tanto, a pesar del calor (o gracias a él), sigamos leyendo.

Namaste.