Autor, Literatura, Wagenstein

Lejos de Toledo, Angel Wagenstein

Tras leer El pentateuco de Isaac y Adiós, Shangai era lógico terminar la trilogía de Wagenstein con esta novela, que sigue como sus precursora tiene como base una comunidad judía, en este caso, en Bulgaria.

LejosdeToledoSi mientras en El pentateuco de Isaac abundaba el estilo humorístico y satírico que sorprendía por encontrarse enmarcado en una época dura (recordemos que el protagonista pasa por dos guerras mundiales, la disolución del Imperio Austrohúngaro… etc) o mientras que Adiós Shanghai mantenía un hilo conductor de espías con mucha emoción e intriga, en este caso, Lejos de Toledo ofrece una visión diferente, y no es otra que la de la memoria.

Porque de la mano de Albert Cohen, que regresa a la ciudad donde creció para ocuparse de una herencia, lo que vemos son episodios de recuerdo de su infancia, su familia, los amigos que tenía o las anécdotas que ocurrían delante de sus ojos sin que las entendiera de todo su mentalidad infantil.

Se trata, por tanto, de un cambio de registro, de una historia llena de memoria y detalles, pero que pierde la perspectiva y el análisis en pro de los sentimentalismos y de ganar cercanía por tratarse de un tema subjetivo. Además, pierde personajes, abundan los saltos temporales y la trama es más exigua, cobra, por tanto, importancia el punto de vista del ser humano, de los recuerdos y del pasado, de la memoria y de las sensaciones.

La verdad es que esperaba más de este libro, dado que los anteriores me gustaron tanto y tenían un matiz tan diferente que creía saber qué me iba a encontrar. Creo que mucho de lo que ofrece la novela se disfruta más si se conoce la tierra de la que habla, las tradiciones e historias de Bulgaria, la descripción de sus paisajes. Se me ha hecho pesado en ocasiones por la abundancia de detalles dado que no existe una trama clara más que la profusión de recuerdos.

En conclusión, una novela de la que esperaba más. Pero la verdad que Wagenstein sigue demostrando que puede ser el escritor que le dé la gana, en un tono u otro.

No quiero cerrar la entrada sin decir dos cosas: la primera, que merece mención aparte la preciosa fotografía de @castillodnaipes. La segunda, que lo siguiente que publicaré será el resumen de lecturas de 2014.

FICHA:

Te gustará si te gustó
Pros
  • Trasmite un amor por la tierra y una difusión de las tradiciones enorme.
  • El uso de la memoria como elemento conductor.
Contras
  • Abundancia de repeticiones y divagaciones. Poca trama.

Namaste.

Autor, Literatura, Zusak

La ladrona de libros, Mark Zusak

La ladrona de libros es uno de esos libros que se cruzan en el camino de un lector. No sólo porque hay mucha gente que lo ha leído y lo comenta en sus espacios literarios, ni porque se haya adaptado a la gran pantalla. Por si fuera poco, me topé con un podcast de la BBC en la que hablaban de él, así que al final acabé leyéndolo.

Zusak nos acerca a la historia de Liesel Meminger, una niña que comienza a vivir con unos padres adoptivos en la Alemania de mitad del siglo XX.

Efectivamente, como os podréis imaginar, se trata de una novela con malos malísimos, con nazis y guerra por doquier. Pero es cierto que también se destacan otros temas, como la amistad o la solidaridad, además de conferirle a los libros el estatus de objeto de devoción, por una niña que sólo puede robarlos. La importancia de la palabra escrita, la fijación por mantener unos objetos prohibidos, el refugio en la lectura son muchos aspectos que aparecen y que atraerán a cualquiera que le guste la literatura.

Una de las cosas más llamativas de la novela es la narradora, ya que no es otra que la muerte, que se cruza en el camino de la protagonista en varios momentos y que aporta los saltos temporales necesarios para conferirle a la trama una tensión constante, adelantando información algunas veces, animándonos a saber más.

Bien es cierto que no deja de ser un best-seller, esto es, el estilo es sencillo y la trama es entretenida. No esperéis gran profundidad o un estilo muy característico. Pero también es de justicia admitir que es una novela honesta: aporta lo que promete, y eso es muy de agradecer. No se embarra en capítulos sin sentido (ahora mismo estoy pensando en Suzanne Collins) ni añade paja por doquier (ejem, Martin, ejem).

Es una historia triste y enternecedora, de una niña fascinada por los libros, recomendable para aquéllos que busquen intriga y que no quieran complicarse la vida leyendo libros sesudos. A mí me ha gustado, y más todavía al leerlo en un inglés plagado de palabras alemanas. Un Zusak que sabe cómo enfocar la historia, qué omitir, qué contar. No siempre es fácil.

Ahora me queda ver la adaptación del cine. Y, por supuesto, completar el reto de Isi

FICHA:

Te gustará si te gustó
Pros
  • Los saltos temporales y la narración de la muerte animan la historia.
  • El amor por los libros que desprende.
Contras
  • Hacia la mitad del libro el ritmo decae.

Namaste.

Autor, Leiber, Literatura

Los tres violines de Ruven Preuk, Svenja Leiber

Tengo que reconocer que una de las cosas que me empujó a asistir a la presentación de Los tres violines de Ruven Preuk fue el planteamiento de la novela. La inclusión de un personaje protagonista sinestésico, esto es, que fuera capaz de ver la música no puede sino llamar la atención de cualquiera con un mínimo conocimiento musical.

Si encima añadimos que a Preuk le toca vivir en la Alemania de provincias del pasado siglo, la novela ya tiene los elementos necesarios como para hacernos sucumbir.

lostresviolinesRuven Preuk es el hijo del carretero, un muchacho normal con un agudo don para la música. Enseguida comienza a formarse como violinista, superando a cada uno de los maestros que tiene a su alrededor. Un muchacho silencioso que habla a través de las notas, que vislumbra un prometedor futuro gracias a la música.

Ruven se retira. Casi deja de hablar. Pasa horas tumbado en la cama junto al violín. Acaricia el barniz del instrumento, se acerca el dorso al oído y escucha el intestino de la madera. Eres tan liviano. Piensa cuando lo levanta, tan inocente. Y sin embargo me tiranizas. Puedes matarme, lo sabes, pero te falta corazón. Robas el mío, me robas la vida. Los dos estaremos muy solos.

Sin embargo, en el convulso siglo XX los caminos no son rectos. Ni sencillos. Lo previsible no se cumple. La guerra estalla (primero una, después otra) y la realidad difiere bastante de los deseados sueños.

Las marchas no son aconsejables para los padres de las abejas. Por eso todos ellos se quedan en el extranjero y no regresan. Ya puede uno esperar. Esperar por la patria y completamente en vano. Bien es cierto que al final llegan algunas piltrafas humanas, pero sólo en las menos habita aún su vieja alma. Las mujeres acogen esos residuos y nadie les hace preguntas.

Leiber es capaz de organizar una trama compacta, que ni decae ni se presta a la lágrima fácil, sino que reflexiona y evoca muchos temas, desde la esperanza teñida de miedo e incertidumbre de las primeras páginas, hasta la soledad más dolorosa de la mano de Marie, la hija de Ruven, en las últimas.

Aún no soy capaz de saber cómo se puede escribir a la vez de una forma calculada e inteligente pero de forma poética y metafórica, con delicadeza y de un modo muy musical. Quizá se deba a que no es demasiado común dicha combinación: o te alargas e incluyes metáforas o eres escueto y vas al grano. No sé. Lo que sí que entiendo perfectamente es lo que los editores comentaban sobre la compleja traducción, y es que Leiber junta a los sonidos con las palabras, con las sílabas. Evoca música en sus frases.

En definitiva, una novela de las que aplacan, de las que se nos clavan en el corazón, por lo real de la historia, por lo razonable de las sensaciones, por saber que este complejo momento de la historia realmente sucedió. Una historia muy intensa, con frases que uno necesita releer para poder continuar con la lectura. Una trama atrayente, como la luz de la vela, pero con la que hay que tener cuidado, porque quema y hiere.

Los tres violines de Ruven Preuk, es, sin duda alguna, una de las mejores novelas que he leído este año. Una de esas historias a las que exigen una relectura. Una preciosa historia triste que obliga al lector a respirar hondo.

FICHA:

Te gustará si te gustó
Pros
  • Alucinante estilo de la autora.
  • La capacidad de evocar muchos temas distintos más allá de la trama en sí.
Contras
  • Aplaca tanto que hay momentos en los que uno se siente desesperanzado.

Namaste.

Literatura, Wilde

La balada de la cárcel de Reading, Oscar Wilde

There is no Chapel on the day                                                                 No hay oraciones en común

On which they hang a man:                                                                  cuando se cuelga a un condenado:

The Chaplain´s heart is far too sick,                                                        el rostro tiene el capellán

Or his face is far too wan,                                                                        y el corazón atormentados;

Or there is that written in his eyes                                                             o escrito hay algo en sus pupilas

Which none should look upon.                                                               y nadie debe descifrarlo.

 

 

For where a grave had opened wide,                                              Pues donde abrieron la tumba,

There was no grave at all:                                                                tumba no había: sólo hallamos

Only a stretch of mud and sand                                                       cerca del muro pavoroso

By the hideous prison-wall,                                                            una señal de arena y fango,

And a little heap of burning lime,                                                   y un montoncillo de cal viva

That the man should have his pall.                                             que al hombre hiciese de sudario.

 

 

So with curious eye and sick surmise                                          Por eso espiábamos al reo

We watched him day by day,                                                         con el terror en las pupilas,

And wondered if each one of us                                                    y cada quien se preguntaba

Would end the self-same way,                                                      si el mismo fin padecería,

For none can tell to what red Hell                                               pues nadie sabe hasta qué infierno

His sightless soul may astray.                                                       puede llegar su alma perdida.

 

Poesía para acabar un lunes que se ha disfrazado de domingo.

Namaste.