Autor, Houellebecq, Literatura

Las partículas elementales, Michel Houellebecq

Describir un libro como este no es fácil, porque no se trata de una novela al uso.

 

 

Edición de Compactos Anagrama del libro de Houellebecq
Edición de Compactos Anagrama del libro de Houellebecq

Los protagonistas de Las partículas elementales son dos hermanos, Michel y Bruno, diametralmente opuestos: el primero, un científico que vive en el ostracismo y tiene como fin la ciencia, y el segundo, un repelente depravado sexual que causa el rechazo del lector desde el principio.

 

Teniendo como punto de partida estos peculiares personajes, Houellebecq desarrolla una novela diferente, y lo hace con un estilo de escritura muy directo, ni se anda con rodeos ni se justifica con eufemismos. Desde el inicio, aborda temas de un modo muy explícito (tales como el sexo o la violencia).

 

Pero más adelante, el autor cambia de estrategia y nos ofrece una visión claramente científica y objetiva de las situaciones. Esto es, nos sitúa en los contextos históricos, éticos y políticos de un modo radicalmente aséptico, como muestra el siguiente fragmento:

 

El consumo libidinal de masas de origen norteamericano (las canciones de Elvis Presley, las películas de Marilyn Monroe) se extendía en Europa occidental. Con los frigoríficos y las lavadoras, acompañamiento material de la felicidad de la pareja, llegaban la radio y el tocadiscos, que iban a introducir el modelo de conducta propio del flirt adolescente.

 

Es esta combinación la que sorprende al lector, ya que son ingredientes que no suelen ir unidos en las novelas. Es fácil encontrar autores provocativos, y también lo contrario: autores que se centran en la objetividad para desplegar su estilo. Pero la cuestión aquí es que Houellebecq mezcla ambas cosas, y aunque podría parecer un experimento, tiene resultados sorprendentes.

 

Si además el francés decide añadirle una pizca de filosofía, ya tenemos la cuadratura del círculo:

 

En el fondo, se preguntaba Michel observando los movimientos del sol sobre las cortinas, ¿para qué servían los hombres? Puede que en épocas anteriores, cuando había muchos osos, la virilidad desempeñara un papel específico e insustituible; pero hacía siglos que los hombres, evidentemente, ya no servían para casi nada. A veces mataban el aburrimiento jugando partidos de tenis, cosa que era un mal menor; pero a veces les parecía útil hacer avanzar la historia, es decir, provocar revoluciones y guerras, esencialmente.

 

Houellebecq no es un autor políticamente correcto, y por eso no les gustará a muchos, que pensarán que es un depravado, un bruto que escribe obscenidades. Pero el autor va mucho más allá. Analiza una generación de jóvenes individualistas que han buscado la felicidad y el placer y se han topado de lleno con la incomprensión, la soledad y la desesperanza. En este sentido es una crítica filosófica al modo materialista de contemplar la realidad humana.

 

Todo un descubrimiento. Desde aquí sólo puedo dar las gracias a Bartleby por recomendármelo. Su reseña, aquí.

FICHA:

 

Te gustará si te gustó
Pros
  • El estilo peculiar del autor.
  • Los personajes extraños, pero a la vez, palpables, que crea.
Contras
  • En ocasiones se hacen demasiados explícitos algunos temas.

 

¡Feliz semana!

 

Namaste.

 

Autor, Literatura, Vian

Vercoquin y el plancton, Boris Vian.

Tras unos días de silencio, vuelvo totalmente recuperada de los excesos navideños y decidida de volver a la normalidad.

 

Así que, ¿qué mejor manera que empezar el año con una reseña y más si se trata de un libro de Boris Vian?

 

 

Portada de la primera novela de Boris Vian
Portada de la primera novela de Boris Vian

Hay libros que son muy fáciles que reseñar. Hay otros que es difícil explicar cómo son. Este es del segundo grupo. Y eso es porque es un libro inclasificable, raro, extraño, diferente. Ya en el prólogo el lector se da cuenta de que el autor va a contarnos lo que quiera, siguiendo las normas que él considere necesarias.

 

El inicio de la novela comienza en una surprise party, una especie de bacanal donde existe un importante derroche de alcohol, drogas y sexo. Pero enseguida Vian se manifiesta como un trilero, un tramposo que cambia las reglas según le convenga. Esta es sin duda la parte más alocada, divertida y entretenida del libro.

 

El protagonista es el Mayor, un joven que se enamora de una muchacha a la que decide pedir en matrimonio. Para ello tendrá que visitar a su tío, un funcionario enclaustrado en su oficina. Así, Vian nos traslada al gris mundo de la burocracia y del papeleo. Y como tal nos da su punto de vista, que nada tiene que ver con el de Kafka: Vian se dedica a ridiculizar a cualquiera que forme parte de la maquinaria estatal, haciendo hincapié en su inutilidad. Como muestra un botón:

 

Emmanuel se había pasado tanto rato mirando las musarañas aquella mañana, que las había gastado con los ojos. Había restos de musarañas por todas partes, y sus cadáveres yacían bajo el escritorio de Adolphe Troude, ya de por sí atestado por cuatro toneladas de abonos diversos, guardados en saquitos de lona, pues este encomiable individuo se dedicaba a la agricultura en su huerto de Clamart.

 

En definitiva, Vian derrocha una prosa fresca y sorprendente, donde el límite de las reglas tradicionales sobre la trama no existen. Y por eso sorprende, porque no tiene nada que ver con las novelas al uso, no sabemos por dónde nos va a salir ni cómo va a acabar el asunto. Aunque hacia la mitad del libro se ralentiza la trama, el lector mantiene el interés por conocer el final, que es acorde con el resto de la novela: puro Boris Vian.

 

FICHA:

 

Te gustará si te gustó
  • La importancia de llamarse Ernesto, Oscar Wilde.
Pros
  • El autor, que desde el prólogo sorprende al lector.
  • Lo extraño del libro en sí. Divertido, refrescante. Difícil de olvidar.
Contras
  • Allá por la mitad del libro la trama se ralentiza.

 

Namaste.

Literatura, Los Indispensables

Indispensable VI: Germinal

Os traigo como indispensable una joya de la literatura francesa.

 

Germinal es una realista novela que tiene como protagonistas a un grupo de mineros que deciden comenzar una huelga contra la patronal. Se trata de un relato crudo y vívido de las condiciones de vida de varias familias mineras, donde cada uno de sus miembros han de bajar a la mina a diario para ganarse un mísero sustento.

El cuarto estadoZola consigue que cualquier lector se ponga en la situación de los trabajadores del siglo XIX, antes de que los derechos de los trabajadores fueran una realidad.

 

Poco más me queda por decir, porque creo que el resto lo tendréis que comprobar por vosotros mismos. En cualquier caso, lo considero indispensable no sólo como una muestra literaria, sino también para hacer memoria de lo que acontecía no hace demasiado tiempo por estos lares.

 

Como imagen, no podía faltar El cuarto estado de Volpedo.

Y vosotros, ¿lo habéis leído? ¿Qué libro consideráis que ha de estar en esta sección?

 

FICHA:

 

Te gustará si te gustó
Pros
  • La prosa y el realismo que desarrolla el autor.
  • El final.
Contras
  • En algunos episodios se hace un poco pesado.
  • La tristeza y la resignación de los personajes.

 

 

Namaste.