Autor, Literatura, Spiegelman

Metamaus, Art Spiegelman

Metamaus es uno de esos libros que le entran directamente a los ojos a todos aquéllos que leyeron Maus. Un libro que, partiendo de la base de cómo se realiza una novela gráfica, nos descubre los entresijos de la creación, cómo surge la idea y cómo se acaba materializando en lo que actualmente es.

Pero, ¿en qué consiste? Pues en resumidas cuentas es un conjunto de bocetos, entrevistas y otros datos de interés con los que Art Spiegelman nos explica el proceso de creación. Desde el momento inicial en el que se plantea por qué es judío hasta la muerte de su madre o como consigue canalizar sus ideas en un planteamiento tan extraño como la representación de los judíos como ratones.

Además, en la edición se incluye un DVD en el que se ofrece información adicional de muchos de los puntos que se mencionan en el libro en sí.

Con ambos soportes, lo que se intenta es llegar a conocer el por qué, el por qué de tratar un tema tan complejo como el Holocausto, el por qué de un cómic o el por qué de la caracterización como animales. Para ello nos tenemos que retrotraer a los inicios como dibujante del autor, pasando por los momentos previos en los que decide plantear la historia de su padre. Pero además de ser él directamente el que nos conteste se incluyen también entrevistas con su mujer e hijos, esbozos y fotografías, comparativas de viñetas y explicaciones sobre, por ejemplo, las distribuciones de los dibujos.

Como ya comenté en Watchmen, cuando al final se incluye una explicación del proceso de creación de un cómic, lo que a priori podría parecer sencillo se convierte en todo un arte. El problema principal ante el que se encontraba Spiegelman era cómo presentar toda la información que le ofrecía su padre. Si bien podría haber recurrido a la siempre sencilla y recurrente organización cronológica, el autor complicó más el asunto incluyéndose a sí mismo para plantearnos la relación intergeneracional con un padre complejo. Este punto da, de un lado, mayor complejidad a la historia, y además, mayor realismo. En lugar de presentarnos a Vladek como un héroe, un superviviente innato lleno de características positivas (honestidad, bravura, valentía e inteligencia), lo presenta como lo que es; un superviviente que hizo lo que pudo para salir vivo de aquélla situación, y una persona de trato complejo, con prejuicios y temores, con traumas y miedos. Hay que ser valiente, si lo vemos desde el punto de vista de Art, exponerse a sí mismo a que lo critiquen como un hijo injusto e impío, cuando lo que es, simplemente es un hijo con una relación compleja con su padre.

Metamaus necesita necesariamente que tengamos Maus a mano. Es cierto que cuando menciona páginas o viñetas los suelen incluir al lado, pero en muchas ocasiones hay que esperar varias páginas para que aparezca, así que os recomiendo que tengáis los dos cerca por si os animáis a leerlo.

Me ha parecido un libro interesante para comprender algo más el universo Maus, por ejemplo: llegado un punto Vladek describe a Art cómo pasaban los judíos delante de los oficiales. Art le pregunta por la famosa banda de música que todos los supervivientes mencionan, pero de la cual Vladek jura y perjura de su inexistencia.

Con estas viñetas Art quiere dejar claras dos cosas: una, lo que recuerda su padre, que es precisamente sobre lo que se basa Maus. Dos, que se sabe que sí que existía una orquesta, por lo que ese engaño de Vladek bien podría haberse confundido en otros detalles de su relato. Lo consigue, como podéis ver, de una forma muy sencilla: repitiendo la viñeta pero como los instrumentos musicales tapados en la segunda de ellas. De este modo, Art manifiesta de su existencia, documentada en muchos otros testimonios, pero no se aleja de la historia de su padre.

Sin ir más lejos, este aspecto fue uno de los que se me pasó cuando leí Maus, y a medida que el lector sigue avanzado en la lectura de Metamaus se da cuenta de que muchos aspectos que podría pensar casuales son meditados y bien pensados.

Ahora bien, le encuentro unas cuantas pegas a Metamaus: de un lado, se da por hecho que el lector acaba de terminar Maus, es decir, apenas hay introducción, va directamente a los detalles, y para la mayoría, que hemos leído el cómic hace ya tiempo, supone una traba. A mí, personalmente, al inicio me ha costado conectar con el libro, me sentía como si acabara de ser arrojada a un universo desconocido. Esto se agrava cuando se cuentan aspectos de la vida de Art que el lector no conoce, o bien que se mencionan transversalmente en Maus pero que uno puede olvidar con facilidad.

En cuanto al DVD y su supuesto contenido adicional, en fin, me ha parecido una mera maniobra publicitaria, para que el que quiere comprar el libro (a un precio como imaginaréis nada barato) piense que no solamente obtiene un libro, sino que viene acompañado de un exhaustivo contenido audiovisual, que, desde mi punto de vista, no se corresponde con la realidad. Intenté verlo en mi DVD pero no hubo forma, no se reproducía por el formato o quién sabe qué cosa. Al final lo vi desde mi ordenador y me di cuenta de que muchas de las cosas que se incluyen están ya repetidas en el libro. Las pocas inéditas no son lo suficientemente cuantiosas como para suponer un incremento significativo del valor del producto.

En definitiva, me ha gustado el libro, pero menos de lo que esperaba. No me ha gustado tampoco la inclusión de las entrevistas con los familiares de Art de forma aleatoria, o suplementaria, es decir, como las partes de un periódico, que de repente se acaba la columna que están leyendo y tienes que saltar 30 páginas porque han incluido algo que no tiene nada que ver y que, precisamente interrumpe la lectura.

Yo os recomendaría que no lo comprarais, que lo toméis prestado de la biblioteca o que os lo preste un amigo. No me arrepiento de haberlo comprado pero sí que me doy cuenta de que es un libro por y para los incondicionales de Maus. Y yo soy de esas. 🙂

FICHA:

Te gustará si te gustó
  • Maus, Art Spiegelman.
Pros
  • Conocer cómo se realiza un cómic.
  • Responde a muchas de las preguntas que nos hemos planteado, como ¿por qué judíos?
Contras
  • El DVD aporta poca información adicional.
  • El precio es algo elevado.

Namaste.

Literatura, Novela gráfica

Píldoras azules. Frederik Peeters.

Vuelvo con una actualización rapidita.

 

 

Portada de "Píldoras azules", de Frederik Peeters.
Portada de "Píldoras azules", de Frederik Peeters.

En este caso le toca el turno a una novela gráfica que me prestó Pedro tras hablarle tan bien de Maus.

 

No conocía este cómic, pero por lo que he leído por ahí es bastante famoso, no sólo porque se ha llevado algunos premios sino porque a la inmensa mayoría que lo ha leído les ha gustado mucho.

 

El tema de la novela es algo muy común: chico conoce a chica, chico se enamora de chica, chico y chica comienzan a salir. Hasta aquí probablemente no difiere de muchas de las novelas que inundan el mercado. Pero la trama central es que la muchacha es seropositiva.

 

Comienza, desde aquí, una lucha contra los prejuicios y estigmas sobre el tema, que el protagonista afronta con incertidumbre pero que supera enseguida gracias a la información que le proporciona un médico muy particular y al amor que siente por ella.

 

Sorprende lo natural que resulta todo: las conversaciones entre los personajes, las situaciones que viven… si en otras novelas se nota que los diálogos son artificiosos, impostados, poco reales, aquí uno se da cuenta de que es todo lo contrario.

 

Os invito a leerlo. Píldoras azules es todo un descubrimiento.

 

 

FICHA:

 

Te gustará si te gustó
  • Las historias que se salen de lo común.
Pros
  • La naturalidad con la que aborda el tema.
  • Las conversaciones. El uso de las imágenes.
Contras
  • La edición de Astaberri, que no me acaba de convencer.

 

 

Namaste.

Balance de 2010, Literatura

Balance de 2010: recomendaciones y joyas

Y ahora la parte buena, lo que os prometí. He decidido dividir los libros que me han gustado en dos grupos bien diferenciados.

 

Entretenimiento al 100%:

 

 

 

  • El asedio. Arturo Pérez-Reverte. Desde mi punto de vista, la novela más completa del cartaginés. Muchos la tachan de pretenciosa, pero a mí me ha parecido una buena mezcla entre novela histórica, personajes tipo Alatriste y misterio. Merece la pena.

 

 

 

 

  • El violinista de Mauthausen. Andrés Pérez-Domínguez. Aunque es el libro más triste de todos los que figuran en este apartado, me gustó, me sorprendió y aunque tiene alguna escena un poco increíble, es entretenido.

 

  • Ni de Eva ni de Adán, Amélie Nothomb. Un libro ameno, curioso, diferente y que aporta algo más, una visión de la realidad diferente, de un mundo ajeno al occidental. Como ya comenté, Nothomb pasa a mi lista de autores bienaventurados.

 

  • Sin noticias de Gurb. Eduardo Mendoza. Novela hilarante donde las haya, donde Mendoza une la ciencia ficción con un humor muy particular que me encantó. Un libro que engancha y divierte. ¿Qué más se puede pedir?

 

 

Joyas o lo mejor que he leído en 2010:

 

Pero si tuviera que escoger lo mejor de lo mejor, lo que más me ha impactado, los libros que más me han gustado porque fueron algo más y los que se quedarán en mi retina son:

 

  • El Pentateuco de Isaac. Angel Wagenstein. La mejor novela que he leído este año. Soprendente, irónico, fantástico. Todo un descubrimiento que no me cansaré de recomendar.

 

  • El castillo. Franz Kafka. Para fanáticos del checo. Puro Kafka.

 

 

  • Los libros arden mal. Manuel Rivas. Mi primera incursión en la obra del gallego no pudo salir mejor parada: una novela con un estilo muy particular, que en algunos momentos se hace un poco cuesta arriba pero que merece la pena.

 

 

  • Maus, Art Spiegelman. La novela gráfica que me encandiló hace poco. Para releer una y mil veces.

 

  • Expiación. Ian McEwan. La sorpresa, lo inesperado. Un estilo clásico, una trama elaborada y unos personajes inolvidables. McEwan, sé bienvenido.

 

  • El Palestino, Antonio Salas. Por el libro en sí y por lo interesante que me pareció su autor en la entrevista que publiqué hace poco. Un acercamiento a la realidad. Totalmente recomendable.

Esto es todo por hoy. Espero que lo paséis genial y que 2011 sea un año inolvidable, con muchas lecturas, nuevos autores y descubrimientos y que sigamos leyéndonos y compartiendo libros y recomendaciones.

Namaste.

 

Autor, Literatura, Spiegelman

Maus, Art Spiegelman.

Vuelvo con una actualización rapidísima.

 

Maus, de Art SpiegelmanYa os conté hace muy poco que acababa de recibir, de la mano de Popular Libros, un ejemplar de la novela gráfica Maus. Había oído muy buenas críticas, no sólo por el hecho objetivo de llevarse un Premio Pulitzer, sino porque los comentarios en anobii y de otras personas ajenas.

 

Ahora vengo a deciros que no exageraban. Es una barbaridad, todo lo que puede trasmitir el autor con sólo unos cuantos dibujos ¡de ratones! Porque sí, señores, los judíos están representados por ratones. Y a pesar de eso la historia es mucho más humana y más real. Spiegelman no se queda en las atrocidades que tuvieron que pasar los judíos en los campos de concentración, sino que además nos cuenta el después, las consecuencias, los traumas y las vidas tras el campo de concentración. Sin hacer héroes a los que no lo fueron. Él lo plantea como un tema de suerte. ¿Qué influyó para que sobreviviera su padre y no otros miembros de su familia? La suerte. Quizá también otros factores: la inteligencia, el dinero, pero en general fue la suerte lo que decidió el destino de miles de personas.

 

Spiegelman nos cuenta la relación con su padre, de una forma sincera y sin tapujos. Podría haber omitido determinados detalles que hacen más humano a su padre, “menos héroe”. Pero no.

 

Es FANTÁSTICO. Maravilloso. Bárbaro.

 

Os digo más: deberías comprarlo. Y lo digo porque se presta a la relectura, a mirar y remirar cada viñeta, cada representación. Es un indispensable en cualquier biblioteca que se precie. El mejor regalo que se puede hacer estas Navidades.

 

¡Y con este libro doy por terminado el Reto 2010! (ya estoy esperando el de 2011, pero por lo que he leído, hasta finales de enero nada. ¡Animaos a participar!)

 

Lo segundo que venía a deciros que es os deseo unas felices fiestas. 🙂

 

Namaste.