Literatura, Wilde

La balada de la cárcel de Reading, Oscar Wilde

There is no Chapel on the day                                                                 No hay oraciones en común

On which they hang a man:                                                                  cuando se cuelga a un condenado:

The Chaplain´s heart is far too sick,                                                        el rostro tiene el capellán

Or his face is far too wan,                                                                        y el corazón atormentados;

Or there is that written in his eyes                                                             o escrito hay algo en sus pupilas

Which none should look upon.                                                               y nadie debe descifrarlo.

 

 

For where a grave had opened wide,                                              Pues donde abrieron la tumba,

There was no grave at all:                                                                tumba no había: sólo hallamos

Only a stretch of mud and sand                                                       cerca del muro pavoroso

By the hideous prison-wall,                                                            una señal de arena y fango,

And a little heap of burning lime,                                                   y un montoncillo de cal viva

That the man should have his pall.                                             que al hombre hiciese de sudario.

 

 

So with curious eye and sick surmise                                          Por eso espiábamos al reo

We watched him day by day,                                                         con el terror en las pupilas,

And wondered if each one of us                                                    y cada quien se preguntaba

Would end the self-same way,                                                      si el mismo fin padecería,

For none can tell to what red Hell                                               pues nadie sabe hasta qué infierno

His sightless soul may astray.                                                       puede llegar su alma perdida.

 

Poesía para acabar un lunes que se ha disfrazado de domingo.

Namaste.

Autor, Literatura

La escalera de caracol y otros poemas, William Butler Yeats

SímbolosLa-escalera-de-caracol-y-otros-poemas

Una vieja torre golpeada por la tormenta,

un ermitaño ciego da la hora.

La espada que todo destruye
aún esgrimida por el loco errante.

Seda bordada en oro sobre el acero,
belleza y locura yacían juntas.

 

Split milk                                                                   Leche derramada

We that have done and thought                                  Nosotros que hemos hecho y pensado,
that have thought and done                                       que hemos pensado y hecho
must ramble, and thin out                                          debemos reflexionar y diluirnos
like milk spilt on a stone                                             como leche derramada sobre una piedra.

 

Gratitude to the unknown instructors             Gratitud a los instructores desconocidos

What they undertook to do                                 Lo que empezaron a hacer
they brought to pass;                                            lo llevaron a puerto;
all things hang like a drop of dew                      todo se suspende como la gota de rocío
upon a blade of grass.                                           sobre una hoja de hierba.

 

 

Three movements

Shakesperean fish swam the sea, far away from land;
romantic fish swam in nets coming to the hand;
what are all those fish that lie gasping on the strand?

 

 

Cuando la poesía habla, el resto de las palabras sobran.

Namaste.

 

IMM

IMM (28)

Me quejaba recientemente por una red social de que los Reyes Magos no me habían traído ningún libro. Lo achaco, como todos los que leemos y compramos con asiduidad a que Sus Majestades no saben muy bien qué comprar. Una pena.

Sin embargo, cuando pensé en publicar un nuevo IMM, me di cuenta de que me equivocaba: que por Navidad sí que había recibido regalos en forma de libro, con la diferencia que ninguno de ellos estaba debajo del árbol. Habían llegado antes y de una forma diferente.

IMM_enero_2014

  • El idiota, Fiódor Dostoievski. Uno de los libros que figuran en mi propósito de este nuevo año, al que le tengo muchas ganas. Sin embargo, tendrá que esperar, al menos hasta que termine con Vasili Grossman (más o menos cuando George R.R.Martin termine “Canción de hielo y fuego”, supongo).
  • Tres rosas amarillas, Raymond Carver. Será mi primer libro de este autor, en este caso un libro de relatos cortesía de Bartleby (al igual que El idiota).
  • Las bellas extranjeras, Mircea Cărtărescu. Soy fan, ya lo sabéis, así que cuando veo a este autor en la portada de una edición de Impedimenta, lo quiero y ya mismo. Ésta vez son relatos, estaba vez parece que hay algo más de humor. Me resulta extraño, pero al mismo tiempo me embriaga una insana curiosidad para saber si me convencerá el autor en esta nueva faceta.
  • Máscara, Stanislaw Lem. Una preciosa portada envuelve los relatos de Lem, al que todavía no he leído a pesar de que llevo mucho tiempo queriendo leer Solaris: una novela de la que todo el mundo habla bien. Lem, allá voy. Gracias a la editorial por ambos ejemplares.
  • El sexo de la risa, de Irene X. Poesía, de la mano de @Tonokix, que decidió que para que me lo leyera me lo tendría que regalar. Se agradece, porque es necesario que salga de tanta novela y empiece a indagar en la poesía y en el ensayo, y éste me parece un perfecto inicio.

Y vosotros, ¿habéis leído alguno de estos libros? ¿Os animáis a leer conjuntamente El idiota?

Os deseo un gran fin de semana lleno de buenas lecturas.

Namaste.

IMM, Literatura

IMM (18)

Os traigo las (penúltimas) adquisiciones. Empiezo a tener miedo por la cantidad de libros que acumulo y que después no me da tiempo a leer.

Penúltimas adquisiciones junto a mi cojín de lectura
Penúltimas adquisiciones junto a mi cojín de lectura
  • From Hell, de Alan Moore y Eddie Campbell. Tras leer la imponente opinión de Molinos, y teniendo en cuenta el gusto que le he cogido a la novela gráfica, acercarme a una tienda de cómics para comprarlo fue todo uno. Ahora mismo ando leyendo Watchmen, del mismo autor, pero sé que no le quedará mucho para que le hinque el diente.

  • Amar es aquí, de Patricia García-Rojo. Regalo de @Tonokix. Llama la atención que la misma autora se dedique, de un lado a la novela y a la poesía. O al menos me llama la atención a mí. En el ámbito de la poesía estoy bastante perdida, la verdad. Lo poco que he leído ha sido a García Montero. Viene bien volver a este género que a veces parece olvidado.
  • La fábrica creátor, de Patricia García-Rojo. También gracias a @Tonokix, en este caso un prestamo de una novela, que es la primera de la tetralogía Los portales de Éldonon, que a decir verdad, desconozco.
  • Lejos de Toledo, de Isaac Wagenstein. La culminación de la trilogía dedicada a los judíos que me encandiló con El pentateuco de Isaac y que continué saboreando con Adiós Shangai. Inevitablemente este libro tenía que estar en mi estantería, junto a los otros dos. Y aquí está. Tengo muchas ganas de leerlo.
  • El vano ayer, Isaac Rosa. Cortesía de Bartleby, uno de los libros que recomendó en su blog y que ahora no tengo excusa para no leer. De momento no figura en mi lista de libros a corto plazo, pero todo se andará.

Esto es todo por el momento. Os deseo unas felices lecturas.

Namaste.

Autor, Caballero Bonald, Literatura

En la casa del padre. J.M. Caballero Bonald

Quizá os suene este libro porque lo tenía desde hace mucho tiempo como pendientes para leer. Este julio le llegó el momento.

 

 

Portugal posa al lado del libro de Caballero Bonald
Portugal posa al lado del libro de Caballero Bonald

Caballero Bonald es un poeta jerezano que ha obtenido bastantes premios. Pero además, también escribe novelas. Ésta es una de ellas y la primera que leo de él.

 

La historia parte de la situación de una familia comerciante de vinos. La trama se nos da a conocer con dos técnicas distintas: de un lado, con el uso del narrador omnisciente que nos relata la historia antigua de la familia Romero-Bárcena, y de otro, la visión de uno de los nietos del creador de la estirpe que abarca la visión personal de la situación más actual. De este modo, el lector va conociendo dos puntos de vista distintos que acaban uniéndose sólo al final de la historia.

 

A partir de aquí, el autor despliega su gran capacidad literaria y de conocimiento de la lengua castellana para embellecer una historia (que podría parecer trillada y que en un comienzo me recordó a La casa de los espíritus) para darle una personalidad definida, una distinción característica que permite al lector reconocer al creador de la novela, oler, ver y en definitiva sentir lo que nos quiere trasmitir. Como muestra, un botón:

 

Y ya estaba su mano detenida en mi mejilla, la palma sedosa abarcándome la mejilla, sus ojos en busca de los míos, y yo sin hablar y sin querer mirarla. El sesgo de la lluvia irrumpía ahora en los cristales y ese rumor creó en el cuarto un clima taciturno, como de víspera de un viaje no deseado.

 

Si leyendo determinadas novelas se puede tener la sensación de que muchas de ellas se distinguen de otras sólo por la trama, es decir, que parecen todas hechas por el mismo patrón, por el mismo modo, como si fueran producidas en masa como los coches de Taylor (¿no os ha pasado?), aquí no nos vamos a encontrar nada de eso, sino que se trata de una narración más artesanal, mejor o peor, pero distinta y original de esas novelas que son sospechosamente iguales.

 

Sin embargo, el punto fuerte de esta novela es, asimismo, su punto débil. En ocasiones el autor se detiene tanto en el estilo y en el vocabulario enrevesado, que el lector tiene la sensación de que no ha pasado nada en varios capítulos, que todo es ornamento. Y aquí está la parte que no me ha gustado. Es demasiado barroco. Aunque al principio su forma de escribir me recordó a García Márquez, según iba avanzando cambié de idea. Os dejo un párrafo del principio del libro:

 

Toda aquella acelerada prosperidad industrial y social- que don Sebastián Romero-Bárcena había sabido establecer con tan consumadas estrategias- se vio por entonces pasajeramente frenada. Parece ser que, a partir del inoportuno asesinato de un archiduque, se les quitó las ganas en parte a los europeos las ganas de beber (o no les quedó mucho tiempo para hacerlo), de modo que las exportaciones acusaron en ciertos casos una merma nada desdeñable.

 

Así que mi valoración del libro se queda en un punto medio. Aunque me ha gustado la forma en la que se hilvana la historia, estoy bastante defraudada con el final. Llegó a engancharme en la mitad del libro, y pensé que el autor estaba mejorando mi opinión… pero cuando leí el final, me dio la impresión de que me faltaba por comprar el último fascículo.

 

FICHA:

Te gustará si te gustó
  • La casa de los espíritus. Isabel Allende.
Pros
  • El estilo, el vocabulario y el estilo propio del autor.
Contras
  • Abusa de adjetivos. Con poca acción.

 

¡No cerramos en Agosto! 🙂

(INCISO: Portugal andaba algo molesta porque ya había aparecido Europa por mi blog y ella no. Así que para evitar rencillas entre hermanas, me solidarizo con ella.)

Namaste.