Autor, Frankl, Literatura

El hombre en busca de sentido, Victor Frankl

Este título lo he visto tantas y tantas veces recomendado que tenía que leerlo.

El hombre en busca de sentido (Herder, 2015) es el título que le da el psiquiatra Victor Frankl a su libro en relación a su experiencia de un campo de concentración.

Con este libro, su experiencia personal y sus conocimientos médicos, Frankl analiza las fases por las que pasaban los prisioneros en los momentos clave de su estancia en un campo: la llegada, la estancia y la posterior liberación.

Cada hombre, incluso en condiciones trágicas, puede decidir quién quiere ser – espiritual y mentalmente – y conservar su dignidad humana.

Página 96

Interesa mucho su análisis sobre las fases que pasan los prisioneros, ya que es algo atípico en el tipo de testimonios de campos, centrados en la experiencia personal del superviviente y alejados de las generalizaciones.

Frankl es capaz de abstenerse y mantenerse en un punto alejado para describir qué situaciones tenían que sufrir y cómo trataban de gestionarlo cada persona. Es un análisis sobre las fuerzas para seguir, que da parte de las claves de los supervivientes: una reflexión sobre qué hacer para continuar adelante cuando parece que todo está perdido.

Hay dos razas de hombres en el mundo, solo dos: la de los hombres decentes y la de los indecentes.

Página 115

En este sentido, es un libro muy interesante a la hora de conocer qué hay detrás de los supervivientes, qué cosas mentales y de actitud tenían en común para saber cómo pudieron continuar viviendo en tan difíciles circunstancias.

También funciona como reflexión existencial, como análisis que todos podemos hacer sobre nuestras vidas.

Sé que a mucha gente le ha parecido sorprendente pero a mí quizá no tanto, al haber leído otros libros del tema, como Goethe en Dachau, donde Nico Rost que aferra a la literatura y cultura para sobrevivir el campo.

En cualquier caso, es un libro muy recomendable que aporta una visión analítica complementaria a lecturas como Si esto es un hombre de Primo Levi o Maus de Art Spiegelman, mientras que se extrapola a las vivencias de cada uno.

Namaste.

IMM, Literatura

IMM (99)

Tras los regalos navideños, os presento la primera compra de libros de este 2024. En su mayoría, títulos que llevan mucho en mi lista de pendientes pero que no tenía en casa y con los que me he acabado haciendo:

  • Contraluz, Thomas Pynchon (Tusquets,  ). Si lleváis tiempo por aquí quizá recordéis el único libro que he leído del autor, La subasta del lote 49, un extraño libro de difícil clasificación. Los que entienden dicen que este título es una muy buena opción para seguir leyendo al autor y yo me he fiado de su criterio.
  • Dos crímenes, Jorge Ibargüengoitia (Machado libros, 2024). No lo conocía, me topé con él en la librería y como me gustó mucho Las muertas decidí comprarlo. Ahora veo que además han sacado una edición mucho más bonita que la mía. Qué rabia. Reseña aquí.
  • El mal de Portnoy, Philip Roth (Debolsillo, 2008). Otro título pendiente de un autor al que no he leído nunca. Bueno, sí que he leído pero su autobiografía Los hechos pero nada más de su obra. Voy al revés.
  • El pájaro pintado, Jerzy Kosinski (Debolsillo, 2011). Recomendado por Jan de Trotalibros, lleva en mi radar un tiempo pero era el típico libro del que acabo postergando la lectura.

  • Humo, Turguénev (Alba editorial, 2018) Del autor he leído Padres e hijos y creo que esta será una buena oportunidad para seguir leyéndole. No es tan largo como el anterior.
  • Suave es la noche, F. Scott Fitzgerald (Debolsillo, 2015). Tengo ganas de regresar al autor para ver si me reconcilio con él tras la lectura de El gran Gatsby. En primer lugar porque ya dudo de mi lectura, porque lo leí en inglés y no sé si capté todo lo que quiso el autor. Así que escojo este para probar de nuevo con el autor.
  • Poesía completa, Emily Dickinson Brontë (Alba, 2018). Bien sabéis que no soy lectora de poesía, pero los que sí saben de poesía recomiendan a Dickinson para iniciarse en el género. Y como me he encontrado con esta edición tan bonita y soy de las que hacen caso a las recomendaciones, se vino para casa. Y ahora, en casa, me doy cuenta de que las poesía son de Brontë y no de Dickinson. No, no me había dado cuenta.
  • El hombre en busca de sentido, Victor Frankl (Herder, 2015). Recomendado por todos los sitios, un testimonio de campo de concentración de esos en los que siempre, siempre acabo cayendo. Reseña aquí.

Y vosotros, ¿habéis comprado algún libro en 2024?

Namaste.