Autor, Dick, Literatura

El fantasma y la señora Muir, R. A. Dick


Llegué a este libro a finales del año pasado, pensando en cerrar el año con una lectura sencilla de la que, la verdad, no esperaba mucho.

Si sois cinéfilos quizá conozcáis esta historia por la película de 1947 dirigida por Joseph L. Mankiewicz, y os hagáis una idea del tono de esta historia.

Para los demás, que parten con la misma información que tenía yo, conocemos poco más que lo que aparece en el título, y la sensación de que esta novela no es sino una historia romántica.

Efectivamente, la señora Muir, recientemente viuda, se muda a un pueblo aislado y en concreto a una casa que parece que va con huésped: el fantasma de Daniel Gregg, capitán de barco y antiguo dueño de la casa. Es este quien decide que la señora Muir junto con sus dos hijos se pueden quedar viviendo en Gull Cottage y entre ambos surgirá una relación muy particular.

Debo de ser muy egoísta, pensó, porque no quiero enderezar nada ni tampoco a nadie; lo único que deseo es que me dejen en paz para lidiar como pueda con este problema que llaman vida.

Pagina 63

Partiendo de algo tan poco sorpresivo como esto («poco» quizá entre comillas porque el capitán no deja de ser un fantasma), el abanico de cosas que podían ocurrir no es demasiado amplio: osea, o acaban mal o se enamorar o algo del estilo.

La suerte de El fantasma y la señora Muir, de la mano de un inteligente R. A. Dick es que evita caer tanto en la pomposidad como en la cursilería para narrar una historia sencilla, bonita a veces y triste en otras ocasiones, de dos personajes que se acaban encontrando en la soledad de una mansión:

Sentirse solo no tenía nada que ver con la soledad, sino con el espíritu, y que por esa misma razón esa sensación se veía agravada a menudo estando en compañía.

Página 197

Sin grandes efectos ni alharacas, sin exceso de giros en forma de saltos temporales, Dick consigue que entre los dos protagonistas se cree un lazo, una unión que traslada las páginas, simplemente con la ternura, el cuidado y el cariño que se tienen.

No digo que llevase una vida sabia, ni mucho menos, pero sí que fue plena y rebosante de madurez. Con mucha frecuencia, uno alcanza la madurez por medio del naufragio y los desastres, y es en el ojo de la tormenta donde algunos hombres descubren a Dios.

Página 159

Una sorpresa mayúscula, con una ambientación de lujo, una lectura ideal si no sabéis qué leer o si os apetece acercaros a una historia corta sin olvidarse de la calidad.

FICHA:

Te gustará si te gustó Mi planta de naranja lima, José Mauro de Vasconcelos
Pros – Bonita, aparentemente sencilla, cándida.
– La ambientación, que nos traslada allí.
Contras – Lo desconocida que parece que es. Gracias, P.

Namaste.

1 comentario en “El fantasma y la señora Muir, R. A. Dick”

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s