No mamá, no fue un título que me recomendaron por alguna red social y que anoté fiándome y curiosa por lo que decían. Los Reyes me lo trajeron a casa y enseguida lo escogí como mi próxima lectura, animada también por ser un libro corto, de los que se leen en una tarde.
Lo leí, no me disgustó y lo dejé en el estante de reseñar.
Ahí se ha quedado semanas, una tras otra, un mes y otro.
Y me di cuenta de que cuando me ponía a escribir una reseña lo que me ocurría es que, en realidad, no tenía nada que decir de este libro. Porque, sorprendentemente, nada ha quedado en mi memoria de él, más que las citas que anoté en mi cuaderno:
Igual que muchas veces es un error volver a un lugar donde una ha sido feliz, a veces incluso hablar de esos tiempos puede ser un error: el negro presente parece todavía más negro por contraste. Entonces empezaba a pensar así; ahora estoy completamente segura.
Página 122
Lo ojeo, releo algún fragmento y nada se me enciende en el cerebro. A veces pienso si puede ser porque no esté lo suficientemente concentrada como para retener la información que leo, o bien que al leer mucho cada libro que leo se difumina… Pero luego recuerdo que no: que puedo recordar determinadas escenas que leí el año pasado o hace cinco o hace diez. Porque me marcaron, porque el autor captó mi atención, porque me dejaron huella.
Cuando leo un libro que no me gusta, ya sé que saldrá un despelleje, y también qué contaré; qué aspectos no me han cuadrado, por temática o estilo. Pero claro, leer un libro del que no sabes decir NADA tres meses después es mucho peor: la indiferencia suprema de no haber aguantado ni un año en mi memoria, darse cuenta de que si tres meses después no sé qué decir de esta historia, de aquí a cinco años imaginaos.
En mi memoria No mamá, no se emparenta con Tienes que mirar de Anna Starobinets pero de una forma mucho más fría, menos emocional, a medio gas.
No siempre se acierta, no pasa nada. Aún así me sigue dando la misma rabia que la primera vez.
Namaste.
Ayyy, cómo te entiendo, a mí también me da mucha rabia cuando me encuentro libros que me producen una tremenda indiferencia. Pues tenía este libro en mi estante de pendientes de Goodreads y ahora ya no sé qué hacer con él. Me lo seguiré pensando.
¡Feliz semana!
Me gustaMe gusta
Ya lo habrás visto en GoodReads y en general ha gustado mucho este libro, quizá sea yo la opinión discordante. ¡Ya vamos comentando, Rosa!
Me gustaMe gusta
Tres veces lo he empezado y las tres veces lo he dejado a las pocas páginas pensando que no era el momento. Me da que me va a pasar como a ti. Y mira que los libros de esta colección suelen gustarme mucho.
Me gustaMe gusta
Ay, menos mal que no he sido yo sola, porque todo el mundo habla genial de él y a veces me siento como la rara.
Lo que comentamos: si un libro es olvidado tan rápido no será tan bueno. Gracias por pasarte.
Me gustaMe gusta